TESTIMONIOS RETIRO n° 49 (del 13 al 16 de noviembre de 2008)

* El obrero necesita sus herramientas… en este sentido valoré mucho las dos experiencias anteriores, y esta vez, sobre todo, la meditación sobre la revisión de la propia vida.

* No veía que camino debía seguir, pero aquí he encontrado una orientación para mi vida. Me siento enviado a los otros para transmitir lo que he recibido.

* Me esperaba una experiencia exclusivamente espiritual, pero aquí he tocado todos los aspectos de mi vida: esposa, familia, trabajo, etc. Es una herramienta muy útil.

* Sentía curiosidad por los ejercicios espirituales. Una vez aquí ha sido maravilloso: he visto entusiasmo y armonía, y que era una llamada del Señor. El me ha mostrado el camino que buscaba. Me siento ligero, he dejado aquí un gran peso.

* La primera vez había esquivado la invitación de mi amigo; en esta ocasión también quería escaparme, pero él me acompañó hasta la casa de retiros. Me había dicho que en los ejercicios espirituales iba a encontrar a alguien más fuerte. Estaba tentado de volver a un trabajo que no era honesto, pero durante los ejercicios he tenido la fuerza y la convicción para renunciar.

* Lo que más me llamó la atención es que he sido creado por amor y Dios sigue amándome hasta hoy. Un cristiano debe levantarse cuando ha caído: no me había confesado después de mucho tiempo, pero ahora me siento muy ligero.

* Lo que hace al hombre importante no son los galones, sino su relación con Dios.

* He descubierto la meditación como método de oración y lo voy a instaurar en mi coral. Voy a testimoniar las maravillas del Señor en mi parroquia.